UN ALCALDE CON UN FINAL TRISTE.

ES LA MEMORIA DE SAN JUAN 20-7-36
Era la tarde del 20 de Julio de 1936, el Alcalde de San Juan, Prospero Castaño, reunió a los poco mas de cincuenta hombres que aun, a pesar de todo, permanecían fiel junto a el para luchar contra los sublevados, tenia que informales del siguiente paso que iban a dar.
En un principio se llegaron a formar un grupo de al menos unos trecientos izquierdistas del pueblo, mal armados eso si,dispuestos a luchar por la República, pero habían pasado ya dos días y el cansancio y mas el miedo habían echo desertar a la mayoría de los hombres, unos se fueron a las afueras del pueblo y otros refugiados en sus casas con las familias. Durante esos días se hizo lo que se pudo para evitar que se internaran en el pueblo los militares, en el camino de Las Erillas, se derribo un gigantesco eucalipto que serviría a modo de barricada para cortar el paso desde Camas y el puente de hierro en su primer tramo fue levantado para cortar el paso de Sevilla.
Las noticias que iban llegando de Sevilla no podían ser mas descorazonadas, Triana aquella misma tarde había sido tomada por lo rebeldes y se contaban centenares de muertos por sus calles, la mayoría de los barrios obreros de Sevilla estaban ya tomados y Prospero sabia que era cuestión de horas la toma de San Juan, por su cercanía e importancia para entrar en el Aljarafe y la zona de Coria. El duro golpe del descalabro de la columna minera de Huelva, había afectado al alcalde sabia que entre esa treintena de muertos, mutilados y cientos de detenidos se encontraban amigos y paisanos de el de Cala(de donde el era), las explosiones de los camiones cargados de dinamitas en la emboscada de la Cuesta del Caracol, casi llegando a la Pañoleta, se había oído en San Juan con total nitidez.
Prospero reunió a sus vecinos y le dijo que era hora de abandonar, por el puente se iba acercando un convoy de soldados y legionarios y no quería una sangría en su pueblo, eran al menos cien soldados bien armados y ellos no tenían nada que hacer en una batalla, poco a poco uno a uno se despedían del alcalde con lagrimas en los ojos..
Prospero junto a un guardia municipal, que no quiso abandonarlo, abatido se sentó en su despacho a esperar.
A las nueve de la noche varios legionarios, cruzaron el río a nado y bajaron el puente de hierro, a las diez y cuarto de la noche, el grupo de soldados al mando del Comandante Antonio Olmedo, entraban en San Juan de Aznalfarache en un silencio sepulcral, solo roto por el motor de los vehículos se dirigieron al ayuntamiento y detuvieron al Alcalde Prospero Castaño que fue llevado a Sevilla donde seria fusilado.
Al dia siguiente el Comandante nombraria alcalde a su tio, el bodeguero del pueblo.
La foto es de Prospero Castaño, nacido en Cala (Huelva) y fue alcalde de San Juan desde 1933 a 1936